Alisado de paredes

Años atrás se extendió el acabado con gotelé de las paredes de nuestras casas por diversos motivos. Uno de ellos fue el ponerse de moda, otra era económico, realizar el gotelé en una pared disimula las pequeñas imperfecciones y es más rápido y barato que el acabado en liso. Ahora la mayoría de los hogares prefieren las paredes lisas, permitiéndonos realizar un abanico más amplio de decoración sobre ellas. Pero, ¿Como quitar el gotelé y alisar las paredes de una forma sencilla? Te lo explicamos paso a paso para que no sea un problema. Consúltanos.

Lo primero que tenemos que tener en cuenta es que quitar el gotelé de las paredes es una tarea dura y difícil para aquellas personas que no tienen experiencia en ello, por lo que necesitamos armarnos de maña y de paciencia para que el resultado sea el esperado.

A la hora de comenzar a retirar el gotelé de las paredes, la primera consideración que debemos tener es si nuestra pared tiene aplicada pintura plástica lisa, texturada, en relieve, picada, satinada, brillante o antiguas pinturas al aceite, en estos casos el proceso es más complicado para eliminar el gotelé, por lo que deberemos aplicar otros métodos diferentes como el lijado con lijadora industrial para descabezado de gotelé. Te recomendamos que si no estas seguro del tipo de soporte que tienes actualmente, consultes con un profesional antes de realizar el trabajo.

Para empezar procederemos a proteger enchufes, puntos de luz, marcos de puertas y ventanas, rodapiés, etc, con cinta de carrocero con el fin de evitar que el agua y productos que vamos a aplicar sobre la pared puedan entrar en contacto con ellos.

En los casos en los que se pueda quitar el gotelé totalmente humedeceremos las paredes, bien con un pulverizador, una esponja o rodillo de pintor. Esperaremos a que la superficie se empape y comenzaremos retirando el gotelé de la pared con una espátula ancha. Esta tarea requiere de paciencia por la dificultad y el tiempo que se utiliza en retirar todo el gotelé de las paredes. Tendremos especial cuidado de no realizar rayas y escorchones con las esquinas de la espátula pues habría que repararlas después.

Una vez retirado el gotelé o después del lijado industrial, comenzamos con el alisado de la pared para ello utilizaremos un plaste de renovación, o cubre gotelé en los casos que no haya sido posible retirarlo totalmente, compuesto por polímeros hidrosolubles y cargas minerales, que tenga elevada adherencia y no merme en el secado, el cual aplicaremos sobre la pared ayudándonos de una espátula ancha o una llana. Para realizar la mezcla del plaste, seguiremos las instrucciones que nos indique el fabricante del producto. Aplicaremos sobre nuestras paredes el producto, quitando el plaste sobrante. Una vez seca esta primera mano, lijaremos las paredes, aplicaremos una segunda mano cruzada de plaste y una vez seco volveremos a lijar, si fuera necesario porque nos hubieran quedado imperfecciones, daremos otra mano en dirección contraria, para un acabado impecable. Una vez seca la superficie, y si no hay imperfecciones, se puede volver a lijar y pintar. Nosotros recomendamos que la primera mano sea bastante diluida para ayudar a penetrar al material y favorecer el anclaje. Es importante que la pintura que eligamos sea lo más mate posible evitando así los reflejos incómodos de la luz.